Un día, una amiga suya llamada Orquídea le dijo que le estaba costando mucho ayudar a uno de sus ahijados, Simón, y decidió dejárselo a Camelia, quien después de muchos contratiempos consiguió que se casara con la heredera de Vestur a pesar de ser un mozo de cuadra.
El problema era que, para salvar a su amada, Simón le prometió a Camelia a su primer descendiente, ya fuera niño o niña. Cuando nació, los padres la bautizaron y la llamaron Felicia y el día del bautizo, Camelia se llevó a la pequeña. Años después, la niña se enamoró de un príncipe petrificado que había en el castillo donde vivían y, al desencantarlo, se fue con él. Apresaron a Camelia por brujería y, mientras estaba en las mazmorras, un amigo suyo le dio una cosa para poder escapar. Al ir a quemarla en la hoguera, se transformó y se fue a vivir con su amigo.
En mi opinión, el libro está muy bien. Es interesante, entretenido y nunca deja de sacar sorpresas. Además, no tiene final triste y es algo que me gusta en los libros de fantasía. Mi personaje favorito es Ren, el personaje que ayuda a Camelia a escapar de la prisión. Tiene un carácter único en todo el libro y, aunque parece lo contrario, siempre está pendiente de Camelia.
Silverbook
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ResponderEliminarPor lo que cuentas de los libros de fantasía hacen que la creatividad y la imaginación se desarrolle. m Me gustaría que si lees alguno que no pertenezca a un colección me lo recomiendes, quiero ver si me gustan pero prefiero empezar por una historia que empiece y acabe.
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